(Cuento Inventado)
Erase una vez unas tortugas llamadas Olimpia y Diana, un día las tortugas decidieron salir a dar un paseo por el bosque. El sol estaba resplandeciente y a su lado las hermosas nubes azules.
En el camino tropezaron con la señora conejo, quien iba muy apresurada porque iba a buscar zanahorias para comer.
Diana le dijo: ¡Hola! Señora conejo ¿cómo está usted? Y porque lleva tanta prisa.... y dijo Olimpia es verdad, porque estas tan apurada querida amiga.
La señora coneja contesto: Es que me he quedado dormida y tengo que darle de comer a mis pequeños. Diana y Olimpia se despidieron de la señora conejo y continuaron su camino.
Luego de un rato apareció la señora mariquita y les dijo: ¡Hola tortuguitas! ¿Cómo están? Las. Tortugas contestaron: Estamos bien, y tú. La mariquita contesto: Yo también estoy muy bien. ¿Y eso que ustedes andan por aquí?
Contesto Olimpia: Es que nos decidimos salir a dar un paseo para respirar aire puro. En ese momento apareció Volador, un pajarito muy lindo que todas las mañanas \' alegraba la salida del sol con su canto. Y las tortugas junto a la señora mariquita le dijeron:
Buen día volador, como amaneces esta mañana tan soleada. El pajarito contesto:
Como todas las mañanas lleno de mucha energía para poderles regalar mi canto a todos los. Animales del bosque.
Todos se despidieron y Diana y Olimpia regresaron a su casa para realizar sus labores del día. Y colorín colorado este cuento ha terminado.
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